martes, 16 de agosto de 2016

(re)Iniciando

Que tal vez toque aprender que,
la vida es eso que pasa 
mientras tú no respiras,
que los pensamientos con alcohol se lavan,
pero también se oxidan.
Una ya no sabe si reír o llorar,
si morir o bailar,
si escribir o disparar a la memoria
para ir por ahí chorreando recuerdos.
Que ya me da igual si el vaso
se queda medio lleno o medio vacío,
si los años y los daños me obligan
a llenar mis uñas de tierra,
que aunque abráis mis venas,
cerraré los puños 
y los pondré en alto 
siempre


en señal de rebeldía.

sábado, 30 de julio de 2016

Tierra

Algún día dejarán de sonar tacones lejanos,
nos pillará por sorpresa el aviso de demolición 
y no quedará nada,
miraremos hacia otro lado 
y nos haremos un traje de piel 
con el cuerpo más cercano.
Beberemos a morros de otras bocas
llenando nuestros pulmones marchitos 
de flores secas y aire enfermo.
Tierra bajo las uñas de tanta desgana,
tréboles arraigados a las yemas de los dedos 
de tanto buscar una suerte que, sólo las aves 
que se alimentan picoteando mi cuerpo encuentran.
Aves devoradas por sus propias plumas,
el azul níquel del vencejo abandonando
su cuerpo sobre mis raíces,
la sabia de un animal muerto derramándose
sobre las orillas de un verso...
Yo, la misma tierra de siempre.

domingo, 22 de mayo de 2016

Entendí hace mucho que,
la vida te golpea por la espalda
y sin anestesia
en un mundo de sinestesia.
Que puedes ser autómata de otro corazón 
y erudita de un cuerpo desnudo.
Que respirar por obligación afecta a los ventrículos y que, a veces, 
puedes ahogarte en tus propios estanques
mientras notas la falta de oxígeno 
de unos pulmones que, por momentos,
parecen enfermos.
Que puedes dar vueltas y vueltas,
como una peonza en manos de una niña de seis años,
para acabar en el punto de partida.
Y, que en las coordenadas más localizadas
de mi paroxismo, aprendí a bailar con la locura mientras las noches se escapaban amargas, 
como la bilis de un estómago
a punto de sangrar.

Con las uñas llenas de tierra
quemé mis alas en el fuego de la desgana,
le besé los pies a la muerte,
y comencé a caminar.
Comprendí que,
la vida, es como la imagen de una mujer
sentada en su cama,
de espaldas y con el cabello caído 
sobre uno de sus hombros;
tremendamente bella,
terriblemente indiferente,
y que, aunque te muevas despacio
como una mosca temiendo ser ingerida 
en un panel de miel,
siempre habrá dos manos que con un sólo movimiento, te pueden salvar
o aplastarte para siempre.







jueves, 14 de abril de 2016

Catorce de abril

"Quién me ha robado el mes de abril,
cómo pudo sucederme a mí"
Joaquín Sabina.


Te buscaré en el aire más fresco y limpio,
aquel que llene mis pulmones
y sea capáz 
de saciar mis ganas de ser viento 
y volar.

Te buscaré en el agua cristalina,
aquella que calme mi sed 
cuando mis pies sientan 
que ya no caminan.

Te buscaré en los verdes prados 
y entre el cri cri de la margaritas 
de mi querido Lorca.

Te buscaré en aquella roca 
en la que algún día 
alguien cinceló un sol para que tú dijeras
"Aquí vendré a buscar claridad 
en mis días más apagados"
Y apagabas la luz,
y encendías la oscuridad.

Te buscaré entre las flores de los cerezos
como una gota de lluvia 
buscando asilo en sus estambres.

Te buscaré en el rocío de cada mañana,
entre las margaritas fucsias 
que crecían bajo tu ventana
y en el rítmico aleteo de las libélulas.


Buscaré tu calor en el sol infinito
y alzaré la vista al cielo 
sabiendo 
que te he encontrado.

lunes, 11 de abril de 2016

DOCE DE ABRIL.


El silencio de tu ausencia 
se hace eterno,
como un túnel frío sin salida,
como llevar una semana sin ti.
Despertar cada mañana 
y volver a la realidad,
es como librar una guerra, 
es despertar con la cara hacia el infierno 
y el corazón hacia cielo,
es amanecer sin ti.

Siete días,
siete ramos de flores lilas,
siete mares llenos 
de ballenas arponeadas,
siete poemas,
siete días en los que la vida 
ya
no 
es 
vida.

(A J.B.H. "Porque la amistad verdadera nunca muere")

domingo, 3 de abril de 2016

Mi círculo cromático


Mi mirada es verde 
porque tu plastilina favorita 
para hacer manzanas
es de color verde,
mis manos son negras 
porque en verano te gusta
matar hormigas negras,
mis labios son rojos 
porque la toalla con la que te secas 
es roja,
mi corazón es naranja
porque tú desayunas zumo de naranja.
Y es que dicen que los niños 
vienen "con un pan bajo el brazo",
pero tú viniste con acuarelas 
en los bolsillos
para pintar mi sonrisa de colores.

martes, 19 de enero de 2016

Ya no volverás, aunque regreses.

Poco sabes de mis penas
ni de las veces que me lavo con alcohol las venas,
y remas,
remas hacia la orilla de la selva del silencio,
donde todo se traga en frío,
y me río,
aunque llore por dentro,
y te digo que prefiero el sexo duro a un amor de pastel,
un desnudo contigo a un traje de Cacharel,
beber vino en tu ombligo a un buen champán francés,
y sonríes,
sonríes y cambia el sentido de la rotación de la Tierra,
tierra entre mis uñas
de desgarrar el suelo
cuando no siento tus manos
abajo,
más abajo de mis caderas,
entre mis piernas.
Y tiemblo,
tiemblo intentando caminar entre tanta realidad,
muero,
sístole y diástole dicen que su trabajo es superfluo,
y no me extraña,
me hice ilusiones y no quise dejar nada en el plato...
Aquí me quedo esperando una señal
o un balazo,
que todo lo que el tiempo no cura
lo cicatriza la indiferencia.